Organizar una boda es cosa de dos y a veces pueden surgir problemas en los gustos y opiniones. Al fin y al cabo hay muchas cosas a tener en cuenta: citas, obligaciones, listas de cosas pendientes, visitas a profesionales, valorar y descartar opciones que no son tan interesantes, etc... Es normal que en determinados momentos haya diferencias.
Puede que nos ganemos algún comentario negativo, pero todo lo que conlleva preparar un día tan importante para una pareja es en cierto modo un trabajo.
Desgraciadamente el concepto de trabajo a menudo tiene connotaciones negativas, de ahí que digamos que nos podemos ganar algún comentario negativo, pero nada más lejos de la realidad. Trabajar (y preparar una boda, para el caso de este post) puede ser algo muy placentero. Sin irnos muy lejos a nosotros nos FLIPA nuestro trabajo, y llevarlo a cabo es un placer enorme.
Sea como sea las parejas que trabajamos juntos conocemos esa sensación, y podemos extrapolarlo al hecho de organizar una boda.
Nosotros, por ejemplo, hemos llegado a discutir por chorradas que vistas desde fuera o con distancia son una tontería, y que pensándolo ahora es para habernos dado una colleja a cada uno. Pero en el momento no se ve así, y una decisión u opinión muy simple puede desencadenar una situación incómoda o incluso una discusión.
Y aunque todo el proceso de organizar una boda es algo muy bonito y del que os recomendamos que disfrutéis y seáis conscientes porque tiene mucho encanto (y pasa muy rápido) el trabajar codo a codo con tu pareja puede generar diferencias de opiniones. Una cosa es convivir y tener una relación y otra cosa tener un "compañero de curro" y saber organizarse bien entre los dos.
Con la idea de que sepáis a qué os podéis enfrentar y evitar discusiones (en lo posible, que hay veces que es sano también) hemos hablado con dos parejas que trabajan juntas y que, maravillas de la vida, se casarán en breves.
Ellos son María y David de Valencia en pareja -si no los conocéis en su cuenta de Instagram nos descubren Valencia a sus ojos, recomiendan rincones maravillosos y muchos lugares donde comer rico- y Al Alza Marketing Digital, formado por Candela Ferreira, ilustradora sevillana, y su pareja Raúl, quienes comparten un negocio de diseño y mantenimiento web. ¡Vamos allá!
Pequeño resumen de lo que os encontraréis en este post. O nuestro famoso 'too long; didn't read'
- Organizar una boda es cosa de dos, tenéis que ser un equipo más que nunca para poneros de acuerdo y organizaros mejor.
- Dividiros las tareas entre los dos, podéis centraros cada uno en la parte que más os guste, mejor se os da o que menos os cueste según vuestro tiempo y gustos.
- Si es difícil coincidir, podéis trabajar de forma separada y después juntaros solo para poner cosas en común.
- No pasa nada si en alguno de vosotros recae más peso que en otro, lo importante es que sea algo consensuado y que hayáis decidido entre los dos.
- Para ir concretando y cerrando proveedores os recomendamos que os marquéis un horario o cumpláis los plazos que os propongáis y señaléis en vuestra agenda.
- No todo vuestro tiempo libre es trabajo, tenéis que descansar y disfrutar también del ocio como pareja.
- La planificación, el espacio y la comunicación son tres pilares importantes en los que apoyaros.
Repartir las tareas: que cada uno haga aquello con lo que más a gusto se siente
No todo siempre es bonito, o mejor dicho: no todo es bonito para todos. (Bueno, de mejor dicho nada, porque se sigue sin entender un caralho). Lo que queremos decir es que lo que le gusta hacer a uno al otro no tiene por qué gustarle. Y es por ello que el primer consejo es precisamente ese, que repartáis las tareas por gustos.
Precisamente eso hacen María y David y Candela y Raúl.
Por ejemplo, en Valencia en pareja María es la que organiza y la que controla que todo avance a tiempo para llegar. El resto se reparte según el proyecto.
E incluso, debido a sus inquietudes y gustos, la parte más creativa de su trabajo corre a cargo de María y la parte más técnica a cargo de David.
En el caso de Al Alza Marketing Digital ocurre lo mismo, Candela se encarga de la parte creativa y Raúl de la técnica: “Yo no sé hacer su parte y él no puede hacer la mía, así que formamos el equipo perfecto”.
Gestión del tiempo, organización y saber priorizar
Una de las tareas más difíciles suele ser sacar tiempo para hacerlo. Entre vuestros respectivos trabajos, coincidir en horarios y disfrutar del ocio y vuestro tiempo libre puede ser algo complicado. Así que les hemos preguntado a nuestras dos parejas cómo organizan su trabajo por si os podéis inspirar y os sirve de ayuda.
Por ejemplo, Valencia en pareja hace una lista de tareas detalladas para poder dividir el trabajo y que cada uno se centre en la parte que mejor se le da o que menos le cuesta. María y David son de trabajar poco a poco y a su ritmo y muchas veces lo hacen de forma separada hasta que hace falta poner cosas en común.
Candela y Raúl viven y trabajan juntos desde casa así que se pueden organizar como quieren, y al igual que María y David tienen el trabajo bien dividido y cada uno sabe qué tiene que hacer. "A veces uno tiene más trabajo que el otro o al revés, pero estamos acostumbrados y nos sabemos complementar muy bien"
Las listas suelen venir muy bien para este tipo de situaciones. David (osea, David de d'Althea, vamos, nosotros), por ejemplo, siempre que tiene cosas pendientes por hacer las escribe en un papel y las va tachando. Es una forma muy visual de ir quitándose cosas de encima, ya que conforme la lista se va haciendo más pequeña va manteniendo la motivación para hacerlo todo.
Se puede empezar por lo más sencillo, y así se puede poner un "check" cuanto antes e ir cogiendo ritmo para hacer las cosas más complicadas.
Con la boda pasa lo mismo, y una lista es estupenda, de hecho tanto lo creemos así que hemos creado un checklist que os podéis descargar gratuitamente si os inscribís a nuestra newsletter en el formulario que está al final de este post. Os facilitará mucho el trabajo y lo hará más visual.
Lo importante, al final, es que no os preocupéis si en alguien de vosotros recae un poco más el peso de la organización de vuestra boda, todo depende del tiempo que dispongáis cada uno para dedicarle, pero lo importante es que sea algo consensuado entre vosotros dos y si necesitáis ayuda de la otra persona lo digáis sin miedo.
Establecer horarios de trabajo
Marcarse un horario es importante para cumplir fechas. No es necesario ser muy estrictos con él pero -al igual que antes- sí recomendamos que tachéis en vuestro calendario futuros propósitos que tengáis, como por ejemplo “de aquí en una semana cerrar proveedor de flores”, “en esta fecha ya haber elegido el vestido de novia” etc. Así no os dejáis las cosas para el final ni iréis agobiados. Dedicar a cada sector unos días en concreto (según del tiempo que tengáis) para poder mirar, reuniros y elegir. Es mejor que vayáis concretando y cerrando cada vez para no tener muchos frentes abiertos y que entre el agobio.
Por ejemplo uno de los mayores problemas de Candela y Raúl es que no tienen horarios “trabajamos según la cantidad de trabajo que tengamos y no siempre tenemos los dos la misma carga de trabajo. Hay días que yo me acuesto a las dos de la mañana currando pero hay otros en los que estoy una semana entera sin trabajar”.
David y María lo tienen claro “no trabajamos todo el día ni todos los días juntos. Depende de las ganas que tenemos de seguir trabajando al llegar a casa, cada uno de su respectivo trabajo. A veces (menos de las que deberíamos) priorizamos el descanso o el ocio”.
El descanso es importante, así que no empecéis llenando todos vuestros huecos libres ni os agobiéis. Es mejor ir de poco en poco, disfrutando de cada paso dado.
Separar el trabajo de lo personal, o lo que es lo mismo: un momento para vosotros y otro momento para la boda
Todas las parejas que comparten negocio, ya sea en mayor o menor medida, tienen el mismo problema: separar el trabajo de lo personal. Y es que hasta a nosotros mismos nos pasa, de vivir juntos y trabajar juntos, es muy difícil diferenciar momentos en los que es recomendable tener una pausa. A María/David y Candela/Raúl también les pasa:
Valencia en pareja: “Es complicado, porque muchas veces el trabajo es parte de nuestro hobby. No es raro que salgamos a cenar y acabemos hablando de un proyecto o de las ideas que tenemos para "X" cosa, pero de momento tampoco nos ha supuesto ningún problema”.
Candela y Raúl: “No lo separamos mucho jajaja aunque sí que cuando tenemos mucho trabajo y salimos los dos solos tenemos que esforzarnos por no hablar del trabajo o de cómo vamos a organizarnos. Pero no es un problema ahora mismo”.
A ver, lo cierto es que una boda, pese a que lo estamos tratando como un trabajo en este post, es un evento muy placentero para la pareja. Y una cosa muy importante: tiene una fecha concreta en la que se celebrará, por lo que la planificación dura un tiempo muy determinado. Es difícil llegar a la situación en la que la pareja "sólo hable de la boda", cosa que puede estar más presente en parejas que trabajan juntos y comparten negocio y oficio.
Sea como sea, lo importante en este punto es establecer un momento determinado para centraros en las cosas de la boda y luego seguir disfrutando de vuestro día a día. Que haya un equilibrio.
Liada: el conflicto ya está echado. ¿cómo solucionarlo?
Es la peor parte. Cuando hay algún malentendido o alguna pequeña discusión sabemos que lo que mejor funciona es darnos un poco de tiempo (unas horas) para calmarnos antes de volver a sacar el tema o seguir trabajando juntos. Ya en frío, todo fluye mejor otra vez. ¡Pero hay que hablarlo! No se puede quedar un tema sin solucionar.
Valencia en Pareja
No tenemos demasiados conflictos, hay que decirlo. Pero cuando los hay simplemente lo hablamos.
Candela y Raúl
Por fácil que sea el consejo aplicarlo no siempre es tan sencillo, pero aquí va: comunicación. Hablar siempre lo soluciona todo, y no desde un punto de vista acusador o que culpa, sino desde el punto de vista propio. Decir "yo he sentido esto" es mucho más conciliador que "tú has hecho/dicho esto".
Obviamente este consejo se puede aplicar cuando el conflicto ya está presente durante la organización de la boda, como en cualquier situación de conflicto en la pareja.
Ese y el de escuchar: tenemos una boca y dos orejas. Motivo más que razonable para escuchar el doble de lo que hablamos.
Últimos consejos
Y para terminar, les hemos pedido que nos den unos consejos para poder llevar la relación de pareja lo mejor posible trabajando juntos, ya sea para la organización de vuestra boda o para otro caso en común.
María y David nos han dicho tres valores muy importantes: planificación, espacio y comunicación.
Creemos que dedicar un buen rato a organizar todo el trabajo antes de empezar, ahorra mucho tiempo después. Dividir las tareas al máximo, asignar cada tarea a quién le corresponda, fijar responsabilidades, fechas, etc. Que cada uno tenga su zona de trabajo diferenciada, ya sea en casa o en la oficina, ayuda mucho. También es fundamental tener espacio y tiempo de desconexión en momentos de "atasco" o cansancio, para poder seguir y ser productivx.
Por último, la comunicación es imprescindible; que no se quede nada por decir o por aclarar, ya sea de trabajo o personal.
¡Y eso es todo! Esperamos que conocer la experiencia de estas dos parejas os ayude en la organización de vuestra boda, hacer una buena piña y que todo el proceso de preparación de vuestro día sea igual de maravilloso como el de la boda.
¡Ánimo! Si estás viviendo este proceso con tu pareja, ¿nos cuentas cómo es? Si ya lo habéis vividos: ¿haríais algo distinto? O ahora, con la distancia, ¿crees que algo lo pudisteis resolver de otra forma? ¡Contadnos cositas en los comentarios!