Esta guía no la podíamos empezar de otra manera que por el apartado que nosotros ocupamos, es decir: fotógrafo de bodas. ¡Para algo lo escribimos nosotros! Por tanto vamos a dar nuestro punto de vista profesional (e imparcial -o bueno, lo intentaremos...-) para aconsejaros y daros unas pautas a la hora de escoger vuestro fotógrafo de bodas (también aplicable para videógrafos de boda).
Por si no sabéis de qué va esto, este post es parte de una guía gigante de bodas que hemos llamado 'Cómo organizar una boda de la hostia y que no sea como la de tu vecino', con información que seguro que os puede venir muy bien ahora que os vais a casar.
Empecemos por una gran ventaja actual: la fotografía hoy en día es digital y no es necesario que os desplacéis a un estudio para ver su trabajo. De hecho podéis ver el trabajo de cualquier fotógrafo de bodas desde vuestra casa. Incluso trabajos de profesionales que no son de vuestra comunidad autónoma o de vuestro país. Fácilmente podéis encontrar fotógrafo de bodas en Valencia, Madrid, Sevilla, Barcelona, Alicante, Málaga, Santiago, o donde quiera que estéis.
Debido a esta facilidad, pese a que nosotros somos de Valencia, una buena cantidad de nuestras parejas son de otras partes de España -e incluso del mundo- que deciden celebrar las famosas "bodas de destino" (por ejemplo: esta boda en Casa Santonja siendo los novios de Canadá). Esto no implica que únicamente nos contraten parejas que se van a casar en la Comunidad Valenciana, sino que también nos contratan para desplazarnos nosotros a cualquier punto del mundo (como esta boda en París). Esto sería mucho más difícil sin el actual acceso a Internet.
Vale, sí, sabemos lo que estáis pensando: ¡cabrones! ¡lo estáis haciendo más difícil! Caaaaaaaalma, os vamos a detallar unos puntos importantes que debéis tener en cuenta a la hora de escoger vuestro fotógrafo de bodas o videógrafo.
Resumen 'too long; didn't read'
¿No os apetece leer todo el texto y queréis ir al grano? No hay problema, a nosotros también nos pasa a veces. Aquí tenéis un resumen cortito de los puntos fuertes del post:
- Identificad el estilo de fotografía con el que os sentís más identificados (fotos naturales, sin posados, cándidos, espontáneos, posados...) y buscar profesionales que trabajen ese estilo.
- Hablad con el fotógrafo de bodas (por videoconferencia o con un café en persona) para ver cómo os sentís con esa persona.
- A tener en cuenta: tiempos de entrega del reportaje completo y número de fotos.
- No miréis únicamente fotos sueltas buenas, intentad ver un mínimo de 100 fotos de un mismo reportaje para que confirméis que todo el trabajo se haga con el mismo mimo, cohesión y respetando una misma estética y estilo.
- Mirad qué opinan de ese/a profesional el resto de parejas. Nada más objetivo que la opinión de alguien que ha trabajado con ese/a fotógrafo/a.
- Si tenéis dudas sobre qué hora casaros, consultad con el/la fotógrafo/a para valorar a qué hora hay mejor luz y en qué posición.
- La sesión de preboda es fantástica para perderle el miedo a la cámara y que disfrutéis de un momento vuestro de pura conexión, pasión y diversión.
- La forma de entrega es muy importante. Tanto física (el packaging -la cajita-) como online. En nuestro caso es todo hecho a mano y en exclusiva para cada pareja + enlace online con toda la galería de la boda protegida con contraseña para que los invitados puedan ver también el reportaje de manera fácil. Informaros de cómo entrega el trabajo cada profesional.
- Ideas innovadoras: dejar a mano algunas polaroids para que se hagan selfies los invitados y hacer el famoso 'first look'.
Qué tener en cuenta al buscar vuestro fotógrafo de bodas
Lo primero de todo es saber qué estilo de foto os gusta. A lo mejor no sabéis ponerle nombre pero sí sabríais decir adjetivos o palabras que lo describan (como puede ser natural, espontáneo, cálido…), así que podéis hacer un listado de esas palabras o crear carpetas de fotos que os gusten para saber qué tienen en común: ¿están muy editadas o se ven naturales? ¿Hay poses forzadas o son momentos espontáneos? ¿Os gusta la composición de la foto? Pensad qué queréis que refleje vuestro reportaje fotográfico y buscad trabajos acorde con esa idea, así vuestro abanico de posibilidades será cada vez más cerrado y tendréis una idea clara del estilo que estáis buscando.
Aunque hayamos dicho que no es necesario desplazarse para ver un trabajo de fotografía y vídeo, sí consideramos muy importante conocer de cerca al profesional, si estáis lejos y no es posible hacerlo en persona tomando un café al menos hacedlo por videoconferencia.
Es algo en lo que siempre ponemos mucho ímpetu. Nos gusta que nos conozcan (y a la vez nos hace mucha ilusión conoceros) y que sintáis el feeling, pues es muy importante que os encontréis a gusto con las personas que estarán junto a vosotros en vuestra boda. En las fotos tenéis que salir tal cual sois y seguro que no es lo mismo estar celebrando vuestro día con alguien con quién no os sentís cómodos detrás y que os sigue a todos lados que con alguien con quién estáis agustísimo, que habéis conversado en repetidas ocasiones y que por su actitud o personalidad os hace sentir en confianza.
Por otra parte, gracias a que la fotografía digital ha simplificado el proceso de hacer fotografías está la creencia de que cualquiera puede hacer buenas fotos, y que cuanto más cara sea la cámara mejores fotos hará. Esto no es así, de hecho nuestro equipo es un muy buen equipo pero hay cámaras mucho más caras y no por ello haríamos mejores fotografías. Al fin y al cabo la cámara es una herramienta que permite resolver situaciones específicas, pero no por ello hacer mejores fotos. Lo importante es la capacidad que vuestro fotógrafo de bodas tenga a la hora de captar momentos increíbles y fugaces o componer y crear una imagen ante situaciones que pasan volando y que no se repetirán. Y más aún que todo el reportaje tenga consistencia. Es decir, que no todo se reduzca a un par de fotografías buenas sino que todo el reportaje tenga un mismo cuidado y mimo, una cohesión y una estética.
En nuestro caso nos gusta que, por más que el reportaje sean 700-1000 fotos o las que sean, estéis deseando ver la siguiente foto y que os sorprenda. Que por muchas fotos que veáis no se os haga repetitivo o pesado. Y para ello hay que poner mucho mimo, desde la toma de la fotografía hasta la edición.
Sólo os vais a casar una vez (bueno, en algún caso no será así. Como decíamos en el post principal Ross de FRIENDS ya lleva 3 bodas) y el recuerdo visual que quedará de ese día, además de saber que lo pasasteis increíblemente bien, serán las fotos y el vídeo de vuestra boda.
Es importante también saber cuáles son los tiempos de entrega del reportaje, a no ser que tengáis mucha paciencia y este apartado os dé igual. No es lo mismo esperar un mes a un año, ¡y hemos conocido el caso que hasta dos años!
Por ejemplo: nosotros lo entregamos todo en un máximo de 6-8 semanas, aunque en la primera semana entregamos las fotos de la fiesta, photocall y algún que otro momento que nos haya encantado, que sabemos que estáis impacientes por ver alguna foto aunque sea.
Pedidle consejo a vuestro fotógrafo de bodas si tenéis dudas sobre la hora de la boda o iluminación
Es algo que no siempre se tiene en cuenta ya que va por gustos, pero si no tenéis claro a qué hora casaros preguntarle a vuestro/a fotógrafo/a es una fantástica idea. Hay meses en que la luz es mejor aprovecharla por la mañana y en otras que por la tarde es increíble los cielos y colores que hay. Especialmente si es al aire libre. No podéis controlar si llueve, pero sí elegir la mejor luz y posición para que vuestro reportaje saque lo mejor de si. Lo mismo ocurre con la pequeña sesión que nos gusta hacer el mismo día de la boda. Lo habitual es hacerla después de la ceremonia pero no tiene por qué ser así. Si el sol está muy alto crea sombras demasiado duras, por lo que es mejor trasladarla a cuando la luz sea más suave.
Recordad: no hay necesidad de seguir ningún protocolo, y es mejor asegurarse sacar lo mejor de cada momento que cumplir un horario que perfectamente se puede amoldar a vosotros y no vosotros a él.
Acostumbrarse a la cámara o 'cómo salir más naturales en las fotos'
Vale, tenéis vuestro fotógrafo de bodas elegido, va acorde a vuestro estilo, tenéis buen feeling pero estáis nerviosos porque no estáis acostumbrados a la cámara, sentís que no salís bien en las fotos o que no sois fotogénicos y es justamente todo eso lo que no queréis sentir en vuestro día. Pues bien, no os preocupéis, es algo completamente normal y hacer la sesión de preboda es lo que más os puede ayudar para perderle el miedo a la cámara. A lo mejor no teníais pensado hacerla pero la experiencia de vivir una sesión de fotos previa a la boda os aportará varias cosas:
- Os quitará miedo y nervios estar delante de una cámara porque ya lo habréis vivido
- Conoceréis mejor al fotógrafo y veréis de primera mano cómo trabaja
- La sesión de preboda no es sólo para tener unas fotos preciosas, que también, sino para que reforcéis esa unión personal que tenéis. Que os beséis, os abracéis, os acariciéis, bailéis, saltéis, juguéis y os sintáis más cerca que nunca (física e íntimamente). Desconectar del ritmo vertiginoso del día a día y tengáis un rato para reforzar vuestra relación y que os fotografiemos en todo vuestro amor.
Que una persona salga bien en las fotos depende de lo cómoda, feliz y a gusto que esté. La fotografía es un estado de ánimo. Si vosotros no estáis pendientes de que os hacen fotos y simplemente os centráis en disfrutar de vuestra fiesta y vuestro amor saldréis increíblemente naturales y se verá vuestra propia esencia. Hacer una sesión fotográfica tan íntima antes de la boda os acercará más a esa sensación.
Forma de entrega del reportaje
En nuestro caso la forma de entregar un reportaje tiene una gran importancia. Es la antesala a todo lo que vais a ver, y tiene que tener el mismo mimo y cuidado que el propio reportaje.
Creemos que es importante preguntar a vuestro futuro fotógrafo de bodas cómo entrega sus trabajos. Aunque lo importante sean las fotografías, nosotros consideramos de igual importancia la experiencia de abrir el packaging y descubrirlas. Carla -la mitad de d'Althea junto a David- además de fotógrafa es ilustradora, y en cada entrega personaliza a mano las cajitas que les damos a las parejas. Esto incluye ilustrar sus nombres y fecha, hacer bordados, imprimir, doblar y diseñar cada detalle que incluye el packaging y hacer una ilustración personalizada de los retratos de la pareja. Todo completamente hecho a mano. Como decimos, todo nuestro trabajo -desde el momento en que hablamos por primera vez hasta que entregamos el reportaje- tiene la misma importancia.
Además de la entrega física, especialmente en los tiempos de las redes sociales e Internet, nosotros incluimos siempre un acceso privado a una galería online, en la que solo las parejas y a la gente que ellos quieran podrán acceder mediante una contraseña. En esta galería estarán todas las fotografías de la boda, para así tener una copia de seguridad más y que los invitados de la boda puedan ver todo el reportaje y descargar aquellas que más les guste.
Ideas innovadoras
Para acabar con el apartado de fotógrafos de boda os queremos dar unas últimas ideas para todos aquellos que quieran probar algo nuevo y diferente respecto a las fotos de la boda. Puede que alguna ya la conozcáis pero no queríamos irnos sin mencionarlas:
- Cámaras polaroids: Sería interesante que en algún rincón de vuestro espacio o en el cocktail tuvieseis dos o tres cámaras polaroids y vuestros invitados se hiciesen fotos u os fotografíen a vosotros, mola mucho ver los diferentes puntos de vista, especialmente si es una persona cercana a vosotros (seguramente os abrazará, os besará, os manteará...). Podéis poner un corcho o una cajita para guardarlas y que sirvan como complemento a vuestro reportaje. También es muy bonito que os hagáis alguna foto entre los dos y algún selfie, así tendréis para siempre una foto hecha por vosotros el mismo día que os casasteis.
- First look: Esto es genial para tener siempre de recuerdo. Hay momentos potentes en la vida de una pareja: la primera vez que os conocéis, el primer beso, etc... Ya sabéis que nosotros no seguimos las tradiciones y nos mola todo lo que se salga del protocolo, por tanto hacer un ‘first look’ (veros por primera vez vestidos de novios) antes de la ceremonia, en algún rincón bonito e íntimo, da muuuucho juego. El/la fotógrafo/a os avisará cuando podáis veros y fotografiará ese momento de sorpresa con toda la emoción que tiene. Cada vez más parejas se atreven a verse vestidos ellos primeros antes de hacerlo a los ojos de todos los invitados, es algo mucho más íntimo y romántico.
¡Pues ya estaría! De todos modos, si aún tenéis alguna duda, podéis preguntarnos cualquier cosa sobre fotógrafos de boda sin ningún compromiso siguiéndonos en Instagram o por correo electrónico, que nos encanta leeros y aclarar dudas.